Poema premiado: Hasta la muerte
Los niños sonríen
Porque la sonrisa
Le sonríe
Ellos juegan para su vida
Y la vida juega con ellos
Los niños lloran
Por las arrugas del agua
Se alegran por tener hambre
Ellos no lloran
Por andar descalzos
Sino porque ya lo están
Los niños
No saben que Dios es su padre
Porque él es mi grande
Ellos no saben
Que la vida es la vida
Y hay que vivirla
Y
Entonces
Familia catedrática
Sufre
Ahora que la juventud
Ha consumido la vejez
Y el espejo se burla
La sabiduría
Se asoma
Se ríe
Descubre y maquilla
La ignorancia
Arrugada de juventud
Juventud
Vieja del recuerdo sin importancia
Acaso un olvido
Sin sonrisa
Sin apenas
Una mirada
Juventud
Palpable bella odiosa sin sentido
Amante infierno cazadora
Hambre de pedazos
Recogiendo el olvido
De la vejez
Muerte
El niño enamorado
Mi primer poema, 15 años.
Tu rostro dibuja un
Amor de filigrana.
Puedo oler el derredor
Audaz de tu tristeza.
Un vapor de amor
Resucita en mi corazón
Un te quiero desde el alma.
Y tu perfume congela hasta
Lo más profundo
Una nueva caricia
Me colma el alma de pasión,
Y su perfume congela
Hasta lo más profundo.
En efecto, un sentimiento
Se convierte en hábito,
Y no puedo estar un minuto lejos de ti,
Este amor emana
En la oscuridad, en la claridad
Y sigue centellando
Hasta desesperarme
Y entender que con el alma te estoy amando.
Hoy, se presenta en mi vida
La solemne belleza de tu figura a raudales.
Y más que nunca
Tu belleza es el rallo de luz que me ilumina
Y desnuda mi pecho
De pétalos rojizos
Saturados de pasión
Y un amor de sangre
Que en todo verso me
Pide que te ame.
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